Qué relación existe entre la huella ecológica y el impacto ambiental: Principales características
Alrededor del impacto ambiental surgen muchas de las más importantes discusiones de la actualidad. La mano del hombre ha tenido preocupantes repercusiones en los ecosistemas y en el acceso a los recursos naturales. Frente a esto, surgen, también, diversas herramientas que permiten determinar el avance de dicho impacto, como lo es la huella ecológica.
En la lección de ciencias naturales de hoy te contaremos qué es, para qué sirve y cómo calcularla.
¿Qué es la huella ecológica?
La huella ecológica es, como bien lo dice su nombre, un indicador ecológico que mide si las acciones humanas son o no sostenibles y cuál es el impacto que estas tienen sobre el medio ambiente.
Principales características de la huella ecológica
- Es entendida como el área ecológicamente productiva que se requiere para producir los recursos necesarios y asimilar los desechos que provienen de la actividad humana.
- Establece comparaciones entre impacto, riesgo y beneficio de la actividad humana analizada.
- Su análisis se basa en el acceso a recursos naturales (agua, aire, tierra).
- La huella ecológica se puede medir sobre una ciudad, una región, una persona o una actividad industrial.
- Esta huella puede ser directa (contempla acciones directas sobre la naturaleza), indirecta (no incide directamente, pero si genera efectos en el ambiente) y colectiva (se analizan impactos directos e indirectos. Es propia de comunidades amplias).
- La actividad mundial que más huella ecológica genera es la quema de combustibles fósiles (47.5%). Le siguen la agricultura, el consumo de madera y papel, pesca y ganadería.
¿Para qué sirve la huella ecológica?
En primer lugar, y como lo mencionamos anteriormente, esta permite determinar si una zona del planeta soporta la carga de la actividad humana. Además, se determina la manera en la que se asimilan los desechos. De la mano con identificar qué tipo de impacto ambiental genera este proceso.
Además, de este método de medición surge una noción fundamental: el sobregiro ecológico. Este se refiere a la demanda excesiva de recursos naturales. Lo anterior deriva en la sobrecarga del planeta.
Ahora bien, gracias a la huella ecológica se puede abogar por la inclusión de métodos de producción verdaderamente sostenibles. De esta manera se da un paso más hacia el mejoramiento de la calidad de vida, no solo de los humanos, sino de todos los seres vivos que habitan la tierra.
Calcular la huella ecológica: ¡Lo que debes saber!
El cálculo de la huella ecológica considera algunos factores relevantes. Entre estos se encuentran: el crecimiento poblacional, la deforestación, el consumo y la falta de recursos naturales.
Además, en el proceso intervienen elementos relacionados con las necesidades de cada individuo, como:
- Superficie terrestre para el aprovechamiento directo.
- Terreno fértil.
- Superficies forestales que absorben el CO2 y superficies marítimas aprovechables.
- Reserva de biodiversidad.
Con esto claro, el primer paso consiste en determinar si se estudiará la huella a nivel individual, familiar, de ciudad o país.
Luego, se deberá calcular cuánta energía, materias primas, alimentos y suelos consume la población determinada.
Esto se compara con la superficie de terreno, obtenida a través de tablas estandarizadas.
Por último, se suma la superficie y se divide en el total de la población.
Ahora bien, la huella ecológica se mide en una escala que va del 0 al 11. Esta se reparte entre las diferentes actividades humanas productivas. Su unidad de medida son las las hectáreas globales (gha).
Para finalizar, ¿Cómo reducir la huella ecológica? ¡Consejos clave!
En aras de disminuir el impacto ambiental del hombre, podrás poner en práctica los siguientes consejos y tips:
- Apuesta por la vivienda sostenible. Para lograrlo podrás implementar bombillos de bajo consumo, electrodomésticos con eficiencia energética y asegurarte de disponer adecuadamente de los desechos.
- Aprovecha los medios de transporte sostenible. Si es posible, evita el uso del coche privado, así reducirás la contaminación. Para hacerlo, te recomendamos usar el transporte público y medios de transporte como la bicicleta.
- Ahorra energía. Disminuye el uso de la calefacción y el aire acondicionado. Evita productos de un solo uso y da segunda vida a los objetos. No te olvides de siempre desenchufar los dispositivos que no estás usando en el momento.
- La alimentación sostenible también es un buen camino. Compra alimentos locales, de temporada o de producción orgánica.
Así es como llegamos al final de nuestra lección. No olvides que informándote sobre ciencias naturales podrás descubrir nuevas maneras de ayudar a nuestro planeta. En Luca, nuestra plataforma educativa, te ofrecemos los recursos y metodologías para que no dejes de aprender y enseñar. ¡Ven a conocernos!
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